sábado, diciembre 01, 2007

El Asado. Futuro paraíso perdido de la masculinidad?

Estas breves reflexiones vienen a cuento de una noticia publicada en prensa sobre una disposición de la Dirección Nacional de Bomberos que dice así: "los fuegos para la cocción de alimentos en churrasqueras o parrilleros, que deberán ser usadas con el correspondiente matachispas, siempre que además los mismos sean realizados o supervisados por personas mayores de edad y del sexo masculino."

Inmediatamente de aparecida la noticia, surgieron jóvenes damas clamando contra lo que entienden es una discriminación, ya que se consideran capaces de realizar las tareas arriba detalladas tan bien como los hombres.

Bueno, despacito y por las piedras.
En primer lugar celebrar la previsión y el sentido común de la DNB al producir este documento previamente a la temporada estival, que es, como se sabe, la de más riesgo de incendios.

En segundo lugar celebrar también el conocimiento que de la cultura y los mitos que a ella refieren tienew el redactor según se desprende del texto citado.

Porqué decimos esto. No es acaso capaz una mujer de cocinar una carne a las brasas?
Si. respondemos, pero eso no es lo mismo que hacerse responsable de un asado.

Levi Strauss en su clásico "Lo crudo y lo Cocido", situaba el universo femenino en la cocina y sus guisos y potajes.
El mundo de lo asado es masculino. El hombre no necesita de la intermediación del agua entre el fuego y el alimento.

La aparición y triunfo de grandes cocineros varones, no han hecho perder la femineidad de ese territorio mal que les pese a los metrosexuales.
La cocina es interna, íntima, es el corazón de la casa, y los platos que en ella se preparan son para la familia chica, a lo sumo algún invitado.
Esto coincide con la psique femenina, vuelta a su interior. Como sus órganos sexuales.

Otro cantar es el asado.
Es de por sí un ritual. La celebración del fuego y su poder sobe la carne cruda, sobre lo que fue un animal que latía, respiraba, sentía, hasta que fue abatido por el cazador.
El cazador no solo consigue el alimento sino también, como es agradecido (virtud típicamente masculina) lo ofrenda a sus deidades y a sus iguales. Ya podrán más tarde allegarse las mujeres, los viejos y los niños a rascar las sobras del festín.

Esto en una versión más aggiornada es lo que sigue sucediendo ahora. Por un lado, cerca del fuego, y al influjo de sustancias que alteran la percepción los hombres. Temas trascendentes: Fútbol, política, autos, minas.


Alejado y atareado con los bowls, las ensaladeras y demás, el mujererío (que además es impaciente e importuna varias veces al ASADOR con el sonsonete: "Ya está?") se afana en inútiles ensaladas mientras cacarea sobre temas que desconozco.
Suelen ser ayudadas por algún varoncito que trata de hacer méritos con la novia o la suegra y es mirado por los sabios con conmiseración y simpatía. Es parte del crecimiento.

El asado, actividad que se realiza al aire libre, hacia afuera, es una ceremonia extroversial, dirigida a los demás.
Es el ASADOR sumo sacerdote que ofrenda su trabajo al disfrute de los otros.

El ASADOR, que además no se hace, nace, requiere de una práctica y una experimentación determinadas para poder controlar todo el proceso.
Es por eso que sabiamente la DNB dice "supervisados por personas mayores de edad y del sexo masculino."

Recordemos además que el que consiguió el fuego para los humanos no fué ninguna deidad femenina sino un titán, un ser anterior al Olimpo. Prometeo
Desde el nacimiento prácticamente de los tiempos, el fuego ha estado controlado, cuidado, alimentado, y utilizado por los hombres.

En lo patológico cito al anuario 2005 del FBI donde detalla que el 100% de los piromaníacos detenidos en territorio norteamericano pertenecían al sexo masculino.
Curioso no?


Hoy en día, por el avance de lo femenino y la miserable retirada de lo masculino de la escena pública, las mujeres han ido arrebatando para sí baluartes típicamente masculinos: hay hoy, taxistas, guardas, inspectoras de tránsito.
Ahora vienen a por el fuego.
De nosotros depende.

9 comentarios:

astllr dijo...

clap clap clap

excepciones a la regla:

rompehuevos que quieren apurar el asado son unisex.

al hombre se le da la buseca también.

conozco una mujer piromaníaca

Irina, dijo...

Lo noto simbólico, warren, pero no sintético.
eso me induce un cierto estado de melancolía que me impide hacerle un mejor comentario.

Tomás Eastman dijo...

Astlir
me presenta a la mujer?

Irina:
No se preocupe, ya se le va a pasar

Anónimo dijo...

...las mujeres todavía siguen viviendo en un mundo hecho por y a semejanza del Hombre
y lo que ha pasado es que a partir de fines del XIX el mundo se modernizó y además en las últimas décadas la mujer recuperó una libertad pública jamás vista
entonces estamos en un intermedio
en donde las mujeres se tendrían que crear su propia manera de vivir y ver el mundo
y no tratar de jugar roles que no les van
de esa manera en un futuro, todavía lejano,
todos podríamos vivir de una mejor manera; De una manera más armoniosa
y el entendimiento entre ambos sexos sería mayor
quizás ideal

Tomás Eastman dijo...

rev usted es un optimista equivocado. Como todos los optimistas,Suerte

Ceryle dijo...

A mí más de una vez me tocó hacer el asado. Tarea que encantada hubiera cedido a los ellos. Sólo que no sé por qué siempre me junté con intelectualoides incapaces de concentrarse en un pedazo de carne.

Necesito urgente una definición exacta de "metrosexual", palabra que me intriga. ¿Es de origen español? Porque en varias lenguas aparece escrita así.

Tomás Eastman dijo...

http://es.wikipedia.org/wiki/Metrosexual

EmmaPeel dijo...

Qué quiere que le diga, a mi me gusta estar en un costado con el vermú en la mano charloteando(ni hacer la ensalada ni ahumarme con los chinchulines)

asi que les cedo el puesto contenta

Tomás Eastman dijo...

- Y mirala a aquella, no sé quien se cree. Una acá reventándose con la ensalada rusa y ella allá en la hamaca charloteando. Y vas a ver. A la hora de lavar ni se arrima!