sábado, octubre 27, 2007

Shouldn´t I ?

Estaba yo muy tranquilamente acomodado en el mostrador del Bar y Copetín al Paso Los Laureles, de José P. Verdes e hijo.
Esperaba el comienzo del partido Defensor - Riverplé.
Libaba un enjundioso espinillar proveniente de una vetusta botella cuya longevidad era marcada por el espesor de la grasosa capa de roña que la cubría.

-Pepe, mientras viene el partido ponete unos dibujitos, a ver si los pendejos estos dejan de mangar!, solicité al barista.
Éste, ni lerdo ni perezoso puso un canal infantil.

Estaban pasando uno que me gustó.
Mucho.
Después averigüé el nombre

Tengo miedo

martes, octubre 23, 2007

Revisitando

Estoy medio atorrante, pero igual quería postear algo.

Traigo un texto que revela mis orígenes


domingo, julio 17, 2005

La Vida de mi Padre

Mi padre, Keith Emerson Warren Wilkins, nació en un hogar modesto del barrio Peñarol. Su padre (mi abuelo), Charles Edgard Warren O´neal, era supervisor en los talleres de la compañía de ferrocarriles que, por esos años (fines del siglo XIX), era británica y funcionaba bien. Lamentablemente, a los uruguayos se nos ocurrió nacionalizarla. Si la hubiéramos dejado británica, en vez de hablarse del tren bala Japonés se hablaría del Balinazo Uruguayo. Pero a no irme por las ramas; esto no trata de política sino de sangre.





Mi abuela, Tomasa Wilkins, era negra, descendiente de esclavos. Sus ancestros pertenecían a una familia de terratenientes de apellido Wilkins, el cual, como era norma, les quedó en usufructo cuando libertos. En el momento en que la conoció mi abuelo, trabajaba en un prostíbulo del bajo. Se enamoraron casi a primera vista. Mi abuelo gastó todo su patrimonio, que tampoco era demasiado, en rescatarla. Se casaron al poco tiempo. Él con 25 y ella con 22 años. Dicen, quienes la conocieron, que era de una belleza impresionante y que de su persona emanaba dignidad.

Según contaba mi padre, cuando la abuela llevaba el almuerzo de mi abuelo a los talleres, al verla, a todos los trabajadores se les reventaban los botones de la bragueta. Motivo por el cual, diariamente, mi abuelo llegaba a la casa con 20 o 30 pantalones, para reponerles los botones. Y así, entre los dos, vivían una vida modesta y sin sobresaltos. Sobre el principio del siglo XX nació mi padre: Keith Emerson Warren Wilkins. Junto a él nació un hermano gemelo: Angus Duncan, que por problemas en el parto nació enfermito. Nunca superó la edad mental de un niño de 4 años. Más adelante, a causa de unos hechos que referiremos, nombraron a mi padre curador de su propio hermano.

Cuando mi padre era un tierno niño de diez años, fallecieron mi abuelo y un perro en un atentado anarquista, que hizo explotar una locomotora ubicada en los talleres. Desolada, mi abuela languideció durante cinco o seis años. Luego decidió que no podía seguir viviendo así y decidió volver al África. Había escuchado que un grupo de ex esclavos norteamericanos habían fundado una nación allí. Se despidió de mi padre más o menos con éstas palabras: “Keith, ya tienes edad suficiente para salir a ganarte la vida. No me necesitas más. Vuelvo a mi patria.”, y con un pequeño hato se dirigió al tranvía rumbo al puerto. Nunca más se supo de ella.

No teniendo más familia en el país, mi padre se encontraba solo, con un escasísimo patrimonio que no le permitía proseguir sus estudios y con la responsabilidad de cuidar a su hermano. Durante su infancia ya había trabajado durante breves períodos y se daba cuenta de que eso no era para él. La vida le mostró de golpe su verdadera cara. Necesitaba tomar una decisión de inmediato.... (continuará)

viernes, octubre 19, 2007

por qué?

El otro día la selección de fútbol de Uruguay le ganó a la de Bolivia. No vi el partido.
Cuando me enteré del resultado no me alegré.

Días más tarde Uruguay perdía en Asunción contra Paraguay.
No me importó en lo más mínimo.
Hice una fuercita para ver si salía algo, una lagrimita, un moco, una lagaña. Nada
Absoluta impavidez.

No hay caso, no logro sentir nada por ninguna selección nacional de ningún deporte.
Sin embargo si me pasa con algunos clubes.
Defensor(fútbol)
Trouville (Básquet)
A estos dos no puedo ir a verlos a la cancha ni seguirlos por televisión. Me hace mal. Cualquiera sea el resultado.

Es más, he gritado goles, dobles o touchdowns del Celtic de Glasgow, de los San Antonio Spurs, o de los Packers
Me encanta la Real Sociedad , la Fiorentina, el Inter de Porto Alegre y el Sao Caetano. En Argentina Vélez e Independiente.

Cualquiera de ellos tiene mayor adhesión de mi parte que cualquier combinado Uruguayo.
Aclaro por las dudas que siempre me refiero a deportes de equipo. Los otros no existen.

No sé si será esa identificación que se hace del seleccionado y la patria, el pueblo, las fuerzas vivas y toda una sarta de términos que el proceso cívico militar me enseñó a detestar.
Escuchar a los "periodistas" locales tampoco ayuda. Son todos hinchas, la única diferencia es que ellos en vez de pagar por asistir a los partidos, son pagados para que digan las obviedades que el poderoso de turno quiera.


En fin cosas colaterales que no aportan a contestar mis preguntas: Es bueno que Uruguay gane?
Bueno para quién?

lunes, octubre 15, 2007

Wish she was my sister (older)

Lucinda Williams Car Wheels On A Gravel Road

Sittin in the kitcken a house in Macon
Loretta's singing on the radio
Smell of coffee eggs and bacon
Car wheels on a gravel road
Pull the curtains back and look outside
Somebody somehere I don't know
Come on now child we're gonna go for a ride
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road
Can't find a damn thing in this place
Nothing's where I left it before
Set of keys and a dusty suitcase
Car wheels on a gravel road
There goes the screen door slamming shut
You better do what you're told
When I get back this room better be picked-up
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road


Low hum of voices in the front seat
Stories nobody knows
Got folks in Jackson we're going to meet
Car wheels on a gravel road
Cotton fields stretching miles and miles
Hank's voice on the radio
Telephone poles trees and wires fly on by
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road
Broken down shacks engine parts
Could tell a lie but my heart would know
Listen to the dogs barkin in the yard
Car wheels on a gravel road
Child in the backseat about four or five years
Lookin out the window
Little bit of dirt mixed with tears
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road
Car wheels on a gravel road





Early life

Williams was born in Lake Charles, Louisiana, the daughter of poet and literature professor Miller Williams. Her father worked as a visiting professor in Mexico and Chile as well as different parts of the American South, before settling at the University of Arkansas. His daughter showed an affinity for music at an early age, and was playing guitar at 12.


In 2006, Williams announced her engagement to music executive Tom Overby. Although she first told reporters the marriage would take place in 2006, she still described Overby as her fiancé during her spring 2007 tour.
Lucinda, zafá del Overby ese que es un mercenario. Acá vas a encontrar el cariño que necesitas


lunes, octubre 08, 2007

Sur

El otro día estábamos a la tarde con mi tía Beba recogiendo cangrejos sopita en las rocas de La Estacada.
El cielo claro, la temperatura agradable.
El ruido del mar chocando contra las rocas, y un poco por encima de eso Raffaela Carrá cantando "...para hacer bien el amor hay que venir al sur....".

Todo pintaba para ser perfecto, pero yo no me sentía bien,. Algo se agitaba en el fondo de mi pecho y ensombrecía mi semblante.

Mi tía, sagaz como un roble me dijo,
- Che el, que te pasa. Te noto mal. Alguna pudrición?
- No Tía, nada que ver
- Algo te pasa, ya no eres el muchacho atildado de siempre, estás como ido, desprolijo.
- Para nada
- Pero por favor. Basta mirarte el short. Tiene un agujero que se te sale todo para afuera. Si no fuera tu tía me escandalizaría.
- Es que no encontré otro
- No mientas, sé que tienes más de doscientos, todos de casimir, los más lindos en diseño Príncipe de Gales. Y eso que tienes puesto no califica ni como calzoncillo.
Confía en tu sangre. Que le pasa a esa almita sensible?
- Tía, te lo voy a contar. Es algo que hace tiempo me aprieta el corazón
- Dime sobrino. Qué es?
- Tu sabes tía que compartimos el gusto por la música sureña de Estados Unidos
- Si, esa que le gusta a los white trash. Me encanta. Recuerdo la gira que hicimos por Tennesee y Kentucky, tomando en todas las destilerías y escuchando músicos locales en todas las mugrosas rockolas.
Y que hay con eso?
- Es que tenía ganas de postear algo de eso en El Astro de los Discos, pero no sé. Está como mal visto.
- Y quien te dijo eso? Además; de quien es el Blog?
Es tuyo no? Entonces podés publicar lo que quieras, y al que no le guste que vaya a otro
- Sabés qué Tití?. Tenés razón.
Se va a llamar EL SUR TAMBIEN EXISTE(I) y
EL SUR TAMBIEN EXISTE (II)
- Ese es mi sobrino!!

Al final la expedición pesquera salió de lo más bien.
Dos burriquetas y dos corvinas en cuatro horas.
Como a ninguno nos gusta el pescado las dejamos tiradas en el espigón y nos volvimos a casa de lo más contentos

lunes, octubre 01, 2007